Con tratamientos estéticos como hilos tensores y ácido hialurónico, o incluso con maquillaje, esta tendencia de belleza realza los rasgos faciales
El deseo de resaltar la mirada y lograr un efecto lifting natural ha impulsado la popularidad de la técnica conocida como foxy eyes. Esta tendencia estética, que comenzó como un truco de maquillaje, ha evolucionado hacia un tratamiento de medicina estética que ha ganado un amplio seguimiento, especialmente entre celebridades. La técnica promete una mirada más rasgada, una ceja elevada y un rostro con un aire rejuvenecido, convirtiéndose en uno de los tratamientos más demandados en el mundo de la belleza.
Los foxy eyes se logran mediante procedimientos que elevan la cola de la ceja, modificando sutilmente la forma del ojo para darle un toque almendrado. A través de la elevación de la ceja y un diseño que sigue la simetría del rostro, se consigue un rejuvenecimiento visible sin necesidad de cirugía.
Para lograr el efecto de foxy eyes, existen varias técnicas que combinan distintos tratamientos estéticos. Los expertos recomiendan el uso de hilos tensores, que proporcionan un lifting eficaz y duradero, junto con ácido hialurónico, que ayuda a reposicionar el volumen perdido en la zona temporal y debajo de las cejas.
Tratamientos profesionales
Aunque los tratamientos estéticos profesionales son los más efectivos, también es posible lograr un efecto similar con maquillaje. El truco está en realzar las cejas, aplicando sombras en tonos tierra y creando una línea alargada en el rabillo de los ojos. Además, un buen peinado de las cejas, peinándolas hacia arriba y rellenándolas cuidadosamente, es esencial para obtener ese levantamiento característico de los foxy eyes sin necesidad de cirugía.
El foxy eyes ha demostrado ser una técnica eficaz y popular que, ya sea a través de tratamientos estéticos o de maquillaje, ofrece resultados notables en la rejuvenecida mirada. Sin duda, esta tendencia seguirá siendo clave en el mundo de la belleza, permitiendo que más personas puedan disfrutar de una mirada más despierta, atractiva y naturalmente esculpida.